Obras de teatro en nuestro idioma, la mayor parte españolas
Título: San Franco De Sena O El Lego Del Carmen De Agustin De Moreto_0126
CONCURSO MUNDIAL DE POLICÍAS En el último concurso mundial de eficiencia de los órganos de seguridad de las distintas naciones solo se presentaron el FBI, la KGB y la policía de un país X conocida por sus métodos poco convencionales. El jurado explica las bases del concurso de la siguiente forma: Jurado: Vamos a soltar este conejo en ese bosque y luego parte el equipo de búsqueda de cada organismo de seguridad, uno a la vez. Serán medidos con cronómetros y quien vuelva con el conejo en menos tiempo, por supuesto, será el ganador. Dicho esto, se alista el equipo del FBI y de inmediato sueltan al conejo y parte el equipo entrenado. Asombrosamente, y en solo 2 horas, vuelve el FBI con el conejo, fotografías de las huellas del conejo, antecedentes del conejo, fotos de sus compinches, fotos de los lugares donde se escondió y un sin número de detalles probatorios de la autenticidad del conejo. Sobraron aplausos y felicitaciones, y nuevamente sueltan al conejo, pero esta vez parte tras el la KGB. Increíblemente, en solo 1 hora, vuelve el equipo de la KGB con el conejo, la esposa e hijos del conejo, no solo las fotos de las huellas sino el pedazo de tierra donde piso el conejo, las ramas que rompió en su huida, varios de sus secuaces y un sin fin de probatorios. Nuevamente, los aplausos saturaron el ambiente y se libera, otra vez, al conejo para que esta vez la policía del país X proceda a su captura. De forma casi sobrenatural, en solo 15 minutos aparece con gran revuelo una patrulla, sirena desbordante, luces y un gran movimiento de funcionarios... El Jurado, maravillado e incrédulo por la proeza le dice al comisario responsable de la hazaña: Jurado: Comisario, es asombrosa la velocidad del equipo, pero ¿dónde está el conejo? El comisario se voltea a uno de sus funcionarios y le dice: Bajen al elemento... Es entonces cuando se abre una puerta de la patrulla y se baja un cochino... El jurado se dirige al comisario y le interroga: Comisario, le rogamos nos diga de inmediato donde está el conejo... El comisario, dirigiéndose a los funcionarios que sujetaban al esposado cochino dice: Muchachos, hagan que repita la confesión... Y antes de que los funcionarios hicieran algo, el cochino grita: Sííí!!! Yo soy el conejo!!!... yo soy el conejo!!!... pero no me den más golpes... no más golpes... Yo soy el conejo... Yo soy el conejo...
Yo sé los nombres extraños De las yerbas y las flores, Y de mortales engaños, Y de sublimes dolores. de José Martí, Versos Sencillos